Beasley fue la estrella del partido frente a los Broncos. |
El siguiente partido fue contra los Seahawks en Seattle. Los Falcons no salieron bien al campo y tras varias drives improductivos y un fumble de Ryan, se vieron en un agujero de 14 puntos la descanso. Sin embargo, la actitud al salir del vestuario fue totalmente distinta y Ryan empezó a distribuir el balón de forma increíble y con un parcial de 21-0, los Falcons volvieron a ponerse por delante en el marcador. No obstante, y en un drive en el que debían consumir reloj para cerrar el partido, Ryan lanzó un pase a Julio que se le escapó de las manos, Thomas lo interceptó y los Seahawks se pusieron, con un field goal, por delante en el marcador. Ryan intentó un drive para ganar el partido, pero el último pase, en cuarto down y que hubeira puesto al equipo en fg range, fue desviado tras una interferencia clarísima de Sherman a Julio. Si entrar a debate en esta última jugada, pues los árbitros también tienen derecho a equivocarse, fue flagarante el arbitraje en la primer parte, pues Ryan era golpeado tarde en cada pase y los árbitros no pitaron ni una falta (especialmente destacable fue Bennett, golpeando a Ryan varios segundos después de lanzar el balón). En ataque, por su parte, no he visto un línea ofensivo hacer más holdings que el center de los Seahawks, que se pasó todas las jugadas agarrando sin ser sancionado. Lo dicho, fue un partido intenso que no se pierde por la última jugada, y en parte satisfecho por el carácter demostrado por el equipo. (26-24)
Tras dos partidos lejos del Georgia Dome, los Falcons volvían a casa para jugara contra los Chargers. Tras una primera parte espectacular donde el equipo anotaba hasta en defensa (fumble retornado por Claybron tras sack-fumble de Beasley) el equipo se vino abajo en la segunda parte, especialmente en defensa, y vio como la ventaja de 10 puntos que tenía al descanso fue menguando hasta llegar al empate a 30 con pocos segundos por jugarse. Ryan intentó, por segunda semana consecutiva guiar a los suyos hasta field goal range. La primera jugada del drive fue una recepción espectacular de Julio que ponía al equipo cerca del medio campo. El siguiente pase, fue un pase a Julio en el cual le hicieron una interferencia de libro, y por segunda semana consecutiva, los árbitros decidieron no pitar nada. En tercer down Ryan lanzó un buen pase y puso al equipo a una distancia de field goal de 58yds, sin embargo, Bryant lanzó el chut un poco desviado y el partido se fue a la prórroga. En el tiempo extra, Quinn decidió jugársela en 4ta y 1 en la 50, pero Freeman fue parado y los Chargers consiguieron avanzar lo suficiente en el siguiente drive para chutar el fg y ganar el partido. Este fue un partido decepcionante, pues tras la gran primera mitad, demostrando una superioridad aplastante sobre el rival, el equipo se fue deshaciendo como un azucarillo y acabó perdiendo en la prórroga un partido que debería haber estado finiquitado en el tercer cuarto. (30-33 OT)
Sanu anotando el touchdown de la victoria frente a los Packers. |
Tras una parte de la temporada difícil con partidos exigentes, los Falcons han superado el test, especialmente en ataque. La defensa, por su parte, sigue demostrando desconexiones y momentos muy flojos durante los partidos, sin embargo, parece haber encontrado un pass rush decente, aunque de forma intermitente. Hasta ahora llevan 18 sacks (el año pasado consiguieron 19 en toda la temporada) y Beasley, con 7,5, está demostrando porqué fue escogido en el número 8 del draft el año pasado. Además, Quinn ha encontrado la formación ideal para estas situaciones, con Freeney y Beasley en los ends y Upshaw (por Shelbey, que se rompió el talón de aquiles y estará todo el año de baja) y Clayborn como tackles. Hasta aquí el análisis del segundo cuarto de la temporada, un saludo a todos!